Aunque la primera intención fue hacerlo de una manera inteligible, acabó siendo una vez más un muro de palabras algo enrevesadas y confusas. El propósito era el siguiente: contar la “odisea” que supone (al menos a mi me la ha supuesto casi siempre y me la sigue suponiendo) el hecho de saltar desde el trampolín y adentrarme en la quimera de crear. Marcar un poco las pautas a seguir para tenerlas a mano (incluso para mi mismo) y crear una especie de diario donde poder recoger las incidencias en los distintos proyectos en los que me vería inmerso. Contemplando los estados de la motivación, anímico, de imaginación, de forma etc etc. Todo ello acabó dando forma a “Revolviéndose en la odisea”. Terminó por ser una manera de soltar, sobretodo, las impotencias y las incapacidades a las que me veía inmerso. A pesar de que el plan era uno y finalizó siendo otro, cabe decir que es un “documento”, aunque casi codificado, creo que válido y entrañable, al menos así lo es para mi ya que son cachitos de vida, momentos, realidades, recuerdos.
Prólogo - “Hágase la luz”
Básicamente pretende ser una pequeña reflexión sobre el proceso mental que se produce al enfrentarnos a la tarea de crear algo. Inicialmente está referido a la música pero creo que es extrapolable a prácticamente cualquier disciplina, mayormente, artística.
Pretende contemplar las distintas etapas desde el momento en que surge una posible idea hasta en el que se convierte en una estructura definida y con sentido. Esa búsqueda de la sinceridad y naturalidad en lo que hacemos, sentirnos llenos y satisfechos al hacer algo es sumamente difícil pero que, cuando se consigue, nos aporta un granito de felicidad.
Aparecen un par de cuestiones que, en mi opinión, son otras de las preguntas en las que no existe una sola respuesta verdadera, y que seguro que a más de uno, en más de una ocasión, habrá hecho referencia y se habrá encontrado en que esconden una complejidad considerable. Una de ellas recae en la mayor importancia del fondo o la forma, del “Qué” o el “Cómo” de una obra. Y la otra recae en lo que podríamos llamar el “don” y el “oficio”, lo que es la “vocación” o la “profesión”, saber cuál de los dos es de mayor utilidad, mejor consejero o mejor garantía a la hora de crear.
Estaríamos de acuerdo en que en ambas cuestiones no debería existir ninguna dicotomía entre los conceptos y deberían albergarse ambas por igual en el seno de cada uno, pero también es cierto que en ocasiones alguna de las dos acoge mayor protagonismo y en muchas ocasiones se acaba desarrollando más una que la otra.
En todo caso, es algo tan íntimo como la propia manera de pensar de cada uno. Supongo que lo genial recae en que existan tantas ramas, disciplinas, corrientes distintas fruto de la distinta utilización de los propios recursos de cada uno. No dejemos de aprender y no perdamos la motivación.
El diario consta básicamente de tres categorías: Capítulos, Proyectos y Retos. Distribuidos cronológicamente a lo largo de un período de, más o menos, un año y medio.
Los capítulos corresponderían a estados mentales, más bien anímicos, que determinan la motivación, la obertura mental en el momento concreto y muestra la fluidez del “flujo”. En resumen, los niveles de predisposición y de “inspiración”. Hay también un apartado más llamado Apocalipsis, pero no sería más que un capítulo pero de mayores proporciones.
Los proyectos serían los, propiamente dichos, proyectos propios, la gestación de ellos. La manera de enfocarlos y lo que generan.
Adjunto el listado al que corresponde cada proyecto.
1- “Entrañas” – Tema ”SX-Overload”
2- “El espejo”parte II – Demo ”FunKey World”
3- “Raíces” – Demo Jazzmencos “Toqueteando”
Los retos hacen referencia, como se alude en “La Búsqueda”, a esos momentos en los que existe un compromiso externo donde te pones realmente a prueba. Momentos en los que toca poner la carne en el asador y tirar hacia delante de la manera que se pueda. Procurar usar los recursos de los que se disponen y vislumbrar posibles nuevas fuentes. Recapitulando, cuando aceptas una responsabilidad y no cabe esperar a que llegue esa inspiración caprichosa pues no hay todo el tiempo del mundo. Intentar describir cómo se enfocaron y se vivieron cada uno de ellos.
Adjunto el listado al que corresponde cada reto.
1-“El espejo” parte I – Tema ”Moonday” (Para el 1ºCD de Guitarristas.info)
2- “El Farero” parte I – CD “Lucía pide tiempo” de Toti Negre
3- “El farero” parte II – CD “Después de todo” de Bosk